Ésta vez no traigo una receta de mi estilo improvisado, lo que quizás les dé más confianza, sino que nos fue compartida por los papás de una compañerita de Salvador.
Es una especie de pan verde que llama mucho la atención pero que es muy rica, saludable y amigable para los peques a los que a veces puede ser difícil darles de comer algo con espinaca. Se lo puede asociar con Shrek incluso o algún otro personaje que lleve éste color! Incluso podemos viajar al pasado y decir que es una remake del secreto de Popeye para ser más fuerte...
Puede ser perfectamente parte de un almuerzo junto a una ensalada o en rodajas acompañado con tomate, una feta de queso y algún otro ingrediente que les guste, para hacer sandwiches, para compartir en alguna reunión... incluso después que empieza a perder sabor y textura, lo rebanás y lo tostás en el horno con aceite de oliva, con algún queso de untar seguro queda deli nuevamente.
En fin, acá te cuento de qué va y vos decidís!
Licuás:
1/4 taza de Leche
1/4 taza de Aceite
3 Huevos
1 atado de Espinacas
Mezclás en un bowl:
2 tazas de Harina
2 cucharaditas de Polvo de Hornear
1 taza de Queso rallado
1 cucharadita de sal
Unís las dos preparaciones y llevás al horno en asadera o budinera enmantecada.
Como siempre, se puede agregar algún toque personal, como semillas o más queso rallado por arriba...
¡Bon appétit!
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